Turismo Marítimo en riesgo

Las 24 líneas de cruceros que
representa la FCCA evalúan alternativas que derivarían en una drástica baja de
escalas y pasajeros en puertos mexicanos.
El cobro de 42 dólares por pasajero a los cruceristas
internacionales, aprobado por la Cámara de Diputados, como parte de la Ley
Federal de Derechos 2025, coloca a México en una posición complicada dentro del
turismo marítimo internacional.
Este
aumento, que eleva los costos para ingresar a puertos mexicanos a 213 por
ciento más que el promedio de otros destinos del Caribe, convierte a nuestro
país en el más caro para turistas de cruceros en América Latina.
Este cambio ha generado preocupación entre las principales
navieras, y es en este contexto que tuve la oportunidad de conversar con Michele Paige, presidenta
de la Florida Caribbean Cruise Association (FCCA), quien señaló que esta medida
afecta gravemente la competitividad de México como destino.
Durante
nuestra conversación, Page me explicó que este impuesto amenaza la llegada de
más de 10 millones de pasajeros y tres mil 300 escalas proyectadas para 2025.
La industria de cruceros ha sido un motor económico clave, generando
aproximadamente mil millones de dólares en ingresos directos anuales, más de 20
mil empleos y 200 millones de dólares en salarios.
Además,
en estados como Quintana Roo, el turismo de cruceros representa 42 por ciento
del PIB. Sin embargo, con este incremento, los costos para atracar en México
alcanzarían hasta 70.85 dólares por pasajero, en comparación con los 24 dólares
que se cobran en las Islas Caimán o los 16 dólares en San Tomás, en las Islas
Vírgenes. Esta diferencia, según Page, podría desviar itinerarios hacia
destinos más competitivos, afectando también el promedio de 100 dólares que
cada pasajero gasta en las comunidades visitadas y los 50 dólares adicionales
por miembro de la tripulación.
La presidenta de la FCCA
destacó que esta medida no sólo afecta a las operaciones inmediatas, sino que
pone en riesgo proyectos estratégicos como los 600 millones de
dólares que Royal Caribbean planea invertir en Majahual, así como los esfuerzos
para reconstruir Acapulco tras desastres naturales.
Page
recordó que la industria de cruceros ha demostrado ser un aliado estratégico
para México, enviando barcos cargados de suministros tras el huracán que
devastó Acapulco y colaborando con autoridades locales para fomentar la
seguridad y atraer más turistas.
A
pesar de este historial de colaboración, las 24 líneas de cruceros que
representa la FCCA evalúan alternativas que podrían derivar en una disminución
drástica de escalas y pasajeros en puertos mexicanos. Esto no sólo significaría
pérdidas económicas millonarias, sino también afectaciones severas para las
comunidades costeras que dependen de esta industria.
En este contexto, la falta de diálogo y la premura en la implementación del impuesto plantean preguntas críticas sobre la capacidad de México para mantener su atractivo como destino competitivo. La pregunta que queda es si el gobierno está dispuesto a atender estas preocupaciones y reconocer el valor estratégico de la industria de cruceros.
Fuente: Heraldo de México
https://heraldodemexico.com.mx/opinion/2024/11/29/turismo-maritimo-en-riesgo-657799.html