El proyecto es una medida que pretende lidiar con la saturación en la operación del puerto colimense.

 El 11 de julio de 2019, la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) publicó un comunicado en donde confirmaba que el gobierno mexicano contemplaba la ampliación del puerto de Manzanillo en la Laguna de Cuyutlán, una medida que pretendía lidiar con la saturación en la operación del puerto colimense.

A poco más de cinco años de ese comunicado el sector portuario mexicano continúa a la espera de conocer los detalles de ese proyecto, ante un avance considerable de la saturación no solo en Manzanillo, sino en los demás puertos de altura en México que han observado en sus estadísticas incrementos sustanciales en el manejo de carga contenerizada y otras mercancías.

El proyecto de ampliación de la SCT (ahora Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes – SICT) incluye la construcción de cuatro nuevas terminales: una especializada de contenedores (TEC) con capacidad para movilizar 1.75 millones de contenedores de 20 pies (TEU) al año, otra para granel agrícola, una más para granel mineral y una especializada para hidrocarburos.

“Va a ser un proyecto muy importante. Necesitamos conocer detalles de cuáles son los planes que se tienen para Cuyutlán (…) es el futuro del puerto de Manzanillo”, indicó Manuel Fernández Pérez, director general de SSA Marine México, en su participación en el panel “Las Terminales Portuarias, un eslabón crucial” desarrollado en el XXVIII Congreso Anual de Agentes Navieros, organizado por la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (Amanac).

SSA Marine México, del estadounidense Grupo Carrix, operador privado que en los últimos 30 años ha ganado distintas concesiones en los puertos del país para el manejo de carga especializada, como automóviles, contenerizada y otro tipo de mercancías, así como pasajeros, en Manzanillo, Lázaro Cárdenas, Tuxpan, Veracruz y Progreso.

Manuel Fernández consideró que en la actualidad los puertos mexicanos tienen una amplia posibilidad de crecer de manera sostenida en los próximos años a través de la inversión en infraestructura, dado que el 35% de la demanda de mercancías de importación para el mercado doméstico es transportado por la vía marítima, y “es un número que no hay que despreciar”, así como por la cercanía con Estados Unidos, el principal socio comercial, y por los tratados del libre comercio que se tienen con otros países en el orbe.

Pero el directivo indicó que el mercado marítimo-logístico se encuentra a la expectativa del incremento en la demanda que pudiera presentarse derivado de la tendencia del nearshoring (relocalización de líneas de producción hacia país), a pesar de que la estadística oficial ha sido reiterativa en que la Inversión Extranjera Directa del año pasado y la que va en este año, en su mayoría ha sido por reinversiones. “Aún no vemos la llegada masiva de nuevas empresas y eso es una incógnita que necesitamos resolver para ver si el nearshoring va a ser una realidad o no”, afirmó.

En tanto, voces en el sector marítimo portuario han indicado que la nueva administración federal, al frente de Claudia Sheinbaum, sí tendría entre sus planes de inversión pública para este año el proyecto de la Laguna de Cuyutlán, en momentos en que distintas terminales portuarias se encuentran aplicando inversiones en sus recintos para ampliar la infraestructura que ha sido rebasada por la demanda del comercio exterior en México.

“No es un secreto el decir que el gobierno pasado (de Andrés Manuel López Obrados) no le puso mucho interés a la inversión en infraestructura portuaria, fuera del proyecto magnánimo que quién sabe si algún día va a echarse a andar del transístmico”, dijo por su parte Francisco Orozco, director Comercial de Hutchison Ports Holdings México, otro de los grupos portuarios con amplia presencia en el país, con instalaciones en Ensenada, Manzanillo, Lázaro Cárdenas y Veracruz.

Así mismo, con el cambio de gobierno el sector marítimo portuario mexicano espera que también haya una variación en la designación de personal civil al frente de la administración de los puertos, ya que, según consideran, la introducción de elementos de la Marina ha traído un retroceso en su desarrollo.

En tanto, Beatriz Yera, directora general de APM Terminals México, con concesiones portuarias en Lázaro Cárdenas y Progreso, consideró que el sistema portuario requiere de un trabajo en conjunto para incrementar la eficiencia en las operaciones, y más en momentos en que la fragilidad del sistema se observa cuando los huracanes de temporada obligan a los puertos a cerrar por días las actividades.

“Cuál es nuestra respuesta como actores dentro de toda la cadena para hacer que las soluciones lleguen lo antes posible (…) no depende en muchas ocasiones de factores externos, yo siento que depende de cada uno de nosotros”, afirmó.

A su vez, Omar Lima, director de Terminales de Grupo CICE, indicó que en este tenor es muy importante la gestión gubernamental y que todos los actores de la cadena estén alineados con el proyecto de nación.

“Nuestras autoridades tienen que ejercer esa inversión en infraestructura básica que es necesaria para darle certidumbre a las inversiones”, indicó el directivo de CICE, con presencia como operador portuario y concesionario de terminales en Veracruz y Tampico.