El Transporte Marítimo sostenible avanza a toda velocidad, pero ¿Está haciendo el sector lo suficiente?

Las presiones normativas y las
preocupaciones medioambientales globales están impulsando la transformación
hacia un sector marítimo más ecológico; pero el éxito depende de acelerar la
adopción de tecnologías digitales para la innovación y la optimización, afirma
Caspar Herzberg, CEO de AVEVA.
Piense en el último artículo
que ha pedido por Internet. Lo más probable es que haya viajado en barco hasta
llegar a usted, o al menos a su país de residencia. El transporte marítimo
representa más del 80% del comercio internacional, según la ONU.
Aunque el tráfico marítimo
desempeña un papel fundamental en las cadenas de suministro de las empresas,
esta comodidad tiene un coste medioambiental: Si el transporte marítimo mundial
fuera un país, sería el sexto mayor emisor de gases de efecto invernadero
(GEI). Junto con la pesca, el transporte marítimo genera casi el 3% de las
emisiones mundiales de GEI de origen humano, según la Organización Marítima
Internacional (OMI).
Con un aumento significativo
del transporte de mercancías, la insostenible huella medioambiental del sector
podría crecer hasta un 130% de aquí a 2050. A menos que tomemos medidas
estrictas. Los marcos reguladores son un comienzo.
La OMI ha fijado su rumbo
hacia la sostenibilidad con la estrategia de hitos del año pasado, cuyo
objetivo es lograr cero emisiones netas de gases de efecto invernadero en torno
a 2050. Su objetivo es reducir en un 40% las emisiones de CO2 por trabajo de
transporte (una medida de las emisiones en relación con la distancia recorrida
y la carga transportada) para 2030, en comparación con los niveles de 2008.
Además, las emisiones anuales totales de GEI deben disminuir entre un 20 y un
30% para 2030, y luego hasta un 70-80% para 2040. Paralelamente, la iniciativa
marítima FuelEU de la UE, que forma parte del programa europeo de
descarbonización económica Fit for 55, pretende incentivar la demanda de
algunos tipos de combustibles renovables y bajos en carbono, reduciendo al
mismo tiempo las emisiones sectoriales.
Aumentan las presiones para
adoptar medidas de sostenibilidad
A la urgencia de las presiones
reguladoras y de los clientes se suman los retos de los seguros derivados de
los fenómenos meteorológicos extremos. Las primas están aumentando y se están
lanzando nuevas pólizas vinculadas a las emisiones, que reflejan los costes
crecientes de los cambios[1] relacionados con el clima. El resultado es un
poderoso incentivo doble para que las compañías navieras adopten la
sostenibilidad: el cumplimiento de las nuevas normativas de reducción de
emisiones de organismos como la OMI y la posibilidad de reducir los costes de
los seguros. Es probable que esta convergencia de presiones normativas y
financieras acelere la transición del sector hacia prácticas más sostenibles,
desde la adopción de combustibles más limpios hasta la optimización de las
operaciones para reducir las emisiones.
A medida que esta convergencia
reconfigura el panorama económico del sector, la colaboración entre navieras,
aseguradoras y reguladores será crucial para encontrar el camino hacia un
futuro marítimo más sostenible y resistente.
Se necesitará una estrategia
global y de varias velocidades -que combine respuestas políticas, contratación
pública y soluciones digitales integradas- para que este sector extenso y
dinámico alcance su objetivo.
Tres maneras de incorporar la
sostenibilidad al transporte marítimo
Como elemento esencial para
construir un sector del transporte marítimo resistente y con capacidad de
respuesta, la tecnología podría apoyar los resultados sostenibles de muchas
maneras diferentes. Sólo tres áreas son:
1. Ingeniería de activos más
sostenibles: Una ingeniería más inteligente puede aportar soluciones más
sostenibles, tanto para las nuevas construcciones como para los buques y las
instalaciones existentes. A medida que la industria marítima adopta materiales
emergentes sostenibles, como el acero ecológico, y diseña buques que utilizan
sistemas de propulsión o energías renovables, también crece el uso de la
ingeniería digital integrada. La japonesa Namura Shipbuilding, por ejemplo, ha
digitalizado la ingeniería de sus buques y puentes. Con un sofisticado software
centralizado de modelado y diseño en 3D que facilita la colaboración, la
comprobación y la automatización, Namura ha mejorado la calidad de la ingeniería,
ha reducido los costes de reelaboración y ha acortado el tiempo de diseño en un
10%.
2. Descarbonizar la ingeniería
y las operaciones de los activos: La agenda net-zero requiere una acción
inmediata, como la adopción de innovaciones generadas colectivamente por
coaliciones de empresas. El gemelo digital, con su tecnología ya probada y su
capacidad para intercambiar información a lo largo de la cadena de valor,
permite ambas cosas. Yinson, uno de los mayores contratistas de unidades
flotantes de producción, almacenamiento y descarga (FPSO), no solo ha
digitalizado la ingeniería de sus buques con un sofisticado software
centralizado de modelado y diseño en 3D para facilitar la colaboración y la
comprobación del diseño, sino que también ha ampliado su estrategia de
digitalización a la supervisión y el control de sus activos y operaciones. Con
ello, Yinson se beneficia de un circuito de retroalimentación y de una mayor
comprensión de la adecuación entre el diseño y el rendimiento de sus activos.
3. Mejora continua para
ahorrar recursos y reducir emisiones: Quizá lo más importante sea la acción
inmediata. El análisis avanzado de datos es esencial para optimizar el
transporte marítimo en aras de la sostenibilidad. La tecnología mejora la
eficiencia operativa, reduce las emisiones y promueve la conservación de los
recursos. Los buques conectados, por ejemplo, pueden controlar continuamente el
rendimiento de los motores y el combustible. Junto con los algoritmos de
aprendizaje automático, estos conjuntos de datos apoyan el mantenimiento
predictivo, por lo que los operadores son notificados de posibles problemas
mucho antes de que se produzcan averías. El tiempo de inactividad se reduce al
mínimo y las reparaciones tienen un menor impacto ambiental. CSL Group es el
mayor propietario de buques autodescargadores del mundo. Gracias a la gestión y
el análisis unificados de datos inteligentes, el líder en transbordos evitó
múltiples averías en los activos de la flota y redujo las anomalías, al tiempo
que ahorraba entre un 3% y un 5% de combustible y 120 toneladas de CO2 por
buque al año en sus primeros ocho buques.
Explorar todo el potencial del
sector marino ecológico
El sector marítimo, antes
relativamente lento a la hora de abordar la sostenibilidad, avanza ahora a toda
máquina hacia objetivos de cero emisiones netas. La iniciativa multinacional
Green Shipping Challenge, lanzada en la COP27 y renovada en la COP28, anima a
países, puertos, empresas y otros agentes a construir una cadena de valor más
sostenible. Se han registrado más de 60 anuncios para impulsar la transición,
lo que demuestra el valor de las asociaciones público-privadas en este sector
estratégico a escala mundial.
Como estos agentes comprenden,
las operaciones más ecológicas no se limitan a cumplir la normativa. También
permiten a los operadores abordar problemas relacionados con el envejecimiento
de las flotas y los elevados costes operativos. La supervisión del rendimiento
de los activos con tecnologías digitales certificadas, por ejemplo, hace ambas
cosas. Contribuye a la elaboración de informes medioambientales y, al mismo
tiempo, reduce directamente los costes optimizando el uso del combustible, por
ejemplo, con lo que se consiguen operaciones más ecológicas y eficientes.
Las tecnologías digitales son
el eje de esta transformación, ya que impulsan la eficiencia y las ganancias de
valor a todos los niveles. Solo en términos de sostenibilidad, acelerar la
digitalización puede reducir las emisiones en un 15 % para 2050, según los
expertos marítimos de DNV. Pero la necesidad de un sector marítimo más
ecológico va más allá de la industria. El transporte entra en la categoría 3 de
emisiones indirectas de GEI. La red mundial del sector marítimo afecta a todas
las empresas que dependen del transporte de mercancías, ya sean productos de
consumo adquiridos en línea o materias primas en las cadenas de valor
industriales.
Por eso, para el sector marítimo y sus clientes, la sostenibilidad y la innovación deben ser las principales prioridades de cara al futuro. Es mucho lo que está en juego, pero también lo son las oportunidades. Para 2030, debemos ver avances sustanciales, y para 2050, un sector del transporte marítimo ecológico debería ser una realidad, no un sueño lejano.
Fuente: Tijuana Informativo
https://tijuanainformativo.info/index.php/noticias-de-impacto-nacional-economicas-politica-y-social/item/185852-el-transporte-maritimo-sostenible-avanza-a-toda-velocidad-pero-esta-haciendo-el-sector-lo-suficiente